miércoles, 10 de agosto de 2011

Día 18. New York

Hoy no hay entrada. Toca disfrutar de la última noche del viaje y sobretodo de New York. Conclusiones a la vuelta.
¡Saludos a todos!

martes, 9 de agosto de 2011

Día 17. New York.

Comienza a sr complicado mantener el blog. Y no porque las conexiones sean lentas o los dispositivos no funcionen... simplemente es porque estamos en New York y aquí el tiempo se escapa entre los dedos.
La mayoría conoce esta ciudad, si no ha estada ha oído mucho sobre ella por lo que cuando alguien escribe sobre NY lo único que puede hacer es plasmar las sensaciones que te provoca.
Y hoy las sensaciones han sido espectaculares.
Hoy hemos ido a ver "Priscilla, the queen of the desert". Un musical en un teatro de Broadway. Ha sido alucinante, vibrante, emocionante desde el primer minuto... piel de gallina, vamos. Para gente como nosotros que solo tenemos la oportunidad de verlos en Londres o aquí son oportunidades que no se pueden desaprovechar (sí, en España también hay pero normalmente son adaptaciones hechas para el castellano, y aunque solo sea por volumen la calidad de los intérpretes no puede ser tan elevada, en general). Al menos eso creo.
Y eso que desde fuera,  la primera vez que vinimos, me parecían una atracción turística más. ¡Bendita ignorancia!
El resto del día, chaparrón que comienza a ser habitual en nuestro viaje, recorrido por Central Park y tiendas diversas.
Volviendo al principio, una de esas cosas que pueden pasar en New York: comer la mejor hamburguesa que jamás haya comido. Añadiendo además que sin duda ha sido la más grande, no sé cuantas onzas, pero aseguro que debían ser muchas. Laura, ante el volumen, ha optado por el cuchillo y tenedor.
No creo que haya ciudad en el mundo donde puedan pasar tantas cosas como en ésta. Engancha.
Mañana más.

P.D: Hoy toca apartado de agradecimientos: a mi hermana por las entradas del espectáculo (menudo regalo), a Gemma por otro sitio sorprendente donde comer.













lunes, 8 de agosto de 2011

Día 16. New York.

Pues bien, después de superar la frontera terrestre con Estados Unidos (y pasar casi más nervios que con el oso, no sé por qué se empeñan en vernos a todos como criminales potenciales...) ya estamos en NY!

En el hotel desde las 6:00 AM, con check-in a partir de las 3:00 PM y sin haber pegado casi ojo y oliendo a tigre autobusístico. Por suerte, nos han dejado entrar a las 8h. ¡Cómo mola este hotel!, y encima en el centro. Una promoción de inauguración, ¡nunca más volveremos a pillarlo tan barato!

Pues paseo por NY arriba y abajo que si Times Square, que si Broadway, que si Soho, Noho,... hasta que el calor nos ha fulminado y hemos entrado en nuestro adoradísimo WholeFoods !!Cómo lo echábamos de menos!! Porqué no es por faltar, pero los de Londres no son lo mismo... Un super con todo rico, limpito y ecológico, y donde además puedes hacerte ensaladas y servirte platos de lo más apetitosos.

Tras la pausa más caminata. Y otra vez el calor abrasador de hoy en NY nos ha hecho parar. Jesús con buen criterio, nos ha dirigido a la zona de los muelles para que nos diera un poco el aire...

Hemos estado por la Zona Cero, por cierto muy cambiada desde que vinimos. Están haciendo unas torres que pretenden mantener la memoria de lo sucedido. Están a medias, pero a mi entender impacta menos que ver el socabón que dejaron las torres.

Por último pizza en Brooklyn, tal como nos recomendó Gemma (gracias, y a Inma también) y entrada a Manhattan por el Puente de Brooklyn con la caída del sol. Todo un espectáculo.

Al final son las 11 y todavía despiertos. ¡Es lo que da la energía de la gran manzana!



P.D de Jesús: Increíble el ambiente de vorágine consumista sin sentido en unos almacenes de saldos llamados Century 21. Ha sido literalmente insoportable estar dentro. Como registro, una imagen. También, para una mejor carga de las imágenes las hemos reducido al máximo.



















domingo, 7 de agosto de 2011

Día 15. Montreal-New York.


Aunque yo mismo no me lo crea, esta entrada la escribimos desde el autocar que nos lleva de Montreal a New York. Resulta que en esta parte del globo la mayoría de transportes tienen conexión wi-fi libre y... aquí estamos. El trayecto dura alrededor de una 8 horas y lo hacemos de noche para poder aprovechar, con lo que quede de nosotros, todo el día en Manhattan.
Por otra parte el día ha transcurrido tranquilo por Montreal, mañana con "brunch" incluido en el Mile End, viendo como la ciudad despertaba del sábado noche; seguida de descubrimiento de las zona comercial del centro, llena de movimiento a pesar de ser domingo. Y es que, como en otros muchos países, la mayoría de comercios de las zonas más relevantes no cierran ningún día, haciendo que los horarios sean muy diferentes a lo largo de la semana.
Tampoco podía faltar el clásico chaparrón de Montreal, el cual nos ha permitido descubrir que ésta es la ciudad con la red de galerías más grande del mundo. Los centros comerciales que ocupan las primeras plantas de las manzanas de edificios se conectan con los de las otras manzanas mediante pasillos-avenidas subterráneas que permiten pasar de unos a otros sin pisar la calle exterior. Teatros, galerías, salas de congresos, metro, todo está integrado como un gran mundo entre el subsuelo y los grandes edificios. En total suponen más de 30 km (dato verificado). Podemos asegurar que resulta espectacular, y demuestra que aquí los inviernos deben ser muy duros.
De el resto lo más destacable, como no, el paso, tras una hora de trayecto por la aduana de los USA. Aunque no ha habido ningún problema, solo el cartel indicando con el dibujo de una diana que son un "objetivo" y que se deben tomar las precauciones necesarias ya da un poco de "mal rollo". Eso sí 6 dollars por cabeza.
Mañana por fin en NY...







sábado, 6 de agosto de 2011

Día 14. Montreal-Ottawa-Montreal.

Después de saborear las bondades de dormir en una cama (aunque aún con el traqueteo del tren en el subconsciente), hemos ido a visitar la capital de Canadá: Ottawa.

Dos horas y media de autocar y te plantas en otro lugar bien distinto... digamos que bastante más "yankee". A pesar de ser bilíngües, se escucha inglés-americano por todos sitios, y la comida fastfood y por ende los cuerpos resultantes de esa ingesta masiva que surgen a tu encuentro mientras un sol de justicia te hace recordar con cariño los dos polares que llevabas puestos hace tan solo dos días... Canadá y sus contrastes! Hay que destacar que hemos tenido verdaderos quebraderos de cabeza para hacer la maleta. Había que llevar para todo: montaña con calor, con frío, con lluvia. Ciudad con calor, con frío y con lluvia. Y hemos pasado por todos los estadios, así que nos hemos puesto todo lo que metimos. Suerte que en Gaspé la señora nos dejó hacer un par de lavadoras industriales...

Y hablando de calor... hemos visto el cambio de guardia con músicos y 'bayonetistas, bayoneteros o como se llamen' con el traje típico canadiense. Pero claro, a 200 grados, con la casaca y el gorro de peluche, estaban todos desmayados rezando para que pongan de una vez el uniforme de verano, y que en vez de un castor en la cabeza les dejen llevar una pamela.

Otawa merece la visita de un día (pero con uno es suficiente...) Hemos estado en la colina donde se encuentran los principales órganos de gobierno, y hemos hecho la visita al interior del parlamento. Antenas puestas para entender a la guía que, en perfecto americano, explicaba los pormenores de la institución, anécdotas incluidas. 
Mañana tampoco habrá blog. Viaje nocturno destino NY.








viernes, 5 de agosto de 2011

Día 12 y 13. Gaspé - Montreal

El tren de Gaspé a Montreal es uno de los clásicos en Canadá. Hay tres a la semana. Una locomotora de gasoil lleva unos cuantos vagones de los que brillan por fuera, como si fueran de aluminio pulido. El trayecto son unos 1100 km, la mayoría de vía única y gran parte literalmente junto a la orilla del mar. Durante la parte inicial del trayecto hay tramos en los que se puede ir andando (o al trotecillo, vamos) junto al tren. Parece un tren turístico.
Pues bién, ¡en ese tren hemos estado 19 horas! Desde las 15:30 del día 4 a las 11:00 del día 5. Nuestro record ferroviario. La verdad es que la primera parte, hasta que oscurece, el paisaje son continuas postales, pero claro, llega la noche y aquello se convierte en butacas ligeramente reclinables sobre las que se debe intentar descansar mientras la absoluta oscuridad está fuera y ya no queda nada que ver (aunque la observación de la fauna interna muchas veces hace que el trayecto se convierta en un espectáculo entretenido). Si sumas que antes de las cinco ya amanece en esta región de Canadá, el resultado es que de descanso más bien poco y el día posterior es de los duros.
Pero como en los viajes no puede haber excusas hemos estado descubriendo zonas de Montreal que no habíamos visto: la zona olímpica, el circuito urbano de F1 que como está cerrado al tráfico es utilizado por los ciclistas y patinadores, la calle St Denis (la más importante del Quartier Latin), castores y ardillas en los parques, unos circuitos de esquí nórdico para el invierno...  y los makis, zanahorias y hummus de un supermercado cercano que han sido nuestra cena en la habitación del hotel. Un lujazo.
Mañana más.














miércoles, 3 de agosto de 2011

Día 10. Gaspé (Parque Nacional de Forillon)

Segundo día en el Parque Nacional pero hoy lloviendo desde primera hora de la mañana. Lo que significa más ropa encima y menos gente por el parque, si es que ayer se podía decir que había "mucha".
Por suerte la nube ha aflojado y nos ha permitido visitar cascadas, playas con troncos blanquecinos, bosques, ver algunas focas y sobretodo haber "disfrutado" de la experiencia del día...

En la oficina de información del parque nos han recomendado una caminata por un sendero donde era probable ver osos negros. Y allá que nos hemos ido, después de haber ojeado el folleto sobre las recomendaciones a seguir si ves un oso. Según ellos es muy difícil que muestren actitudes agresivas. Pero eso solo ocupa una pequeñas parte, el resto es un manual completo de autodefensa. Lo más significativo es que dividen la información en: si ataca porque se ha asustado ante tu presencia o si ataca por que tiene instinto depredador. En el primer caso incluso te recomienda que te hagas el muerto y en el segundo... mejor una oración si eres creyente. Así que, primero de todo, para saber como se encuentra el señor oso cuando corra hacia tí, habrá que pasarle un test de conducta o personalidad...

Al grano. En un momento de la caminata, al poco de iniciar el regreso, hemos sentido un ruido gutural potente que provenía de un lado del camino. Justo por donde teníamos que pasar para ir al coche. Por si fuera poco, otro gruñido le ha contestado des del otro lado del camino. Al principio estábamos debatiendo si era de algún perro o coyote, pero en cuanto aquello a comenzado a ser realmente profundo y grave hemos decidido que era un oso. ¡¡¡Eso en mi pueblo se llama emboscada!!! ¡My God!

Pues nada, como para atrás no se podía ir, aunque lo hemos valorado, y allí no había cobertura para llamar a la mujer de información y pedirle que fuera amable y nos dijera en que punto del folleto informativo salía ese grito, y lo que debíamos hacer, pues nos hemos armado con dos palos (uno medio podrido y el otro un palillo de dientes) y una piedra (que como mucho hubiera servido si el oso tiene complejo de perro y va a buscarla) y piernas para que os quiero. Tira rapidito pero sin correr y a rezando para que el bicho, fuera cual fuese, no saliera y tuviéramos que hacernos el muerto tal como sugiere el folleto explicativo....  Hacerse el muerto... ¡¿pero tú crees que si ese bicho sale de la maleza voy a tener que fingir?!

Eso sí como lo del blog tira mucho, hemos sacado un momentito para dejar testimonio gráfico de la situación con vídeo incluido...

Mañana otra aventura, 19 horas de tren, con su noche incluida hasta Montreal... y en butaca. Osea que de blog nada de nada.














Momentos de confusión...